5 formas de lograr el aseguramiento de la calidad del producto en fábricas de alimentación

El aseguramiento de la calidad del producto en fábricas de alimentación es el proceso utilizado para analizar y garantizar que los productos alimenticios mantengan constantemente una alta calidad, permitiendo, a su vez, la satisfacción del cliente que permite generar la confianza para que regresen.

Los clientes potenciales, canales y socios de servicio, evalúan más la calidad del producto que cualquier otra cosa. Para hacer que la reputación de una fábrica de alimentación sea sólida, debe centrarse en las métricas de calidad y los indicadores clave de rendimiento (KPI) que son impulsados por el cliente.

Uno de los desafíos más frecuentes a los que gerentes de producción se enfrentan es el de alcanzar un equilibrio entre las métricas de calidad externas impulsadas por el cliente y las internas orientadas a la eficiencia. Este es un reto que crea una base sólida para el crecimiento de cualquier empresa del sector industrial.

En tal sentido, las 5 formas de lograr el aseguramiento de la calidad del producto en fábricas de alimentación los desarrollamos a continuación:

1. Desarrollar una reputación para sobresalir en los estándares de calidad más exigentes. Marketing, generación de leads, y vender programas que muestren resultados mensurables atraerá clientes potenciales.
2. Hacer que los clientes validen la calidad del producto organizando acciones de llamadas para dejar comentarios en línea.
3. Utilizar la base sólida de calidad del producto para crear nuevos productos en nuevos mercados, atrayendo prospectos y clientes completamente nuevos.
4. El aseguramiento de la calidad del producto en fábricas de alimentación dependerá del menor tiempo de respuesta, mayor precisión y el potencial de mejorar a cada cliente, para ello la interacción es imprescindible.
5. Implementar Configure-Price-Quote (CPQ) como estrategia de crecimiento para que el producto alcance un nivel de calidad requerido y haga que el proceso de fabricación sea más escalable y de alta velocidad.

Cuando una empresa cuenta con un buen equipo de aseguramiento de la calidad del producto, eso le permite a la gerencia corporativa, clientes, reguladores y funcionarios gubernamentales saber que un producto o servicio cumple con los requisitos de calidad. Al brindar un mayor nivel de intensidad para mejorar el aseguramiento de la calidad del producto en fábricas de alimentación la recuperación de los ingresos será más acelerado.

Entonces, ¿Con el aseguramiento de la calidad del producto se obtienen beneficios económicos? Desde luego y, de hecho, será la manera más rápida de aumentar ingresos y de medir los estándares que se aplican al producto antes de salir al mercado.

Para que una fábrica visualice los beneficios económicos, los procesos y sistemas de calidad deben ser escalables, rápidos, integrados y confiables de este modo destacará el potencial que ofrece el producto y la estrategia de venta utilizada. En este sentido, extender la calidad del producto más allá de los límites del cumplimiento es el catalizador que impulsa aumento de ventas y clientes satisfechos.

La piedra angular de cualquier nuevo producto exitoso es la rapidez con la que los clientes confían, adoptan e integran sus enfoques diarios para realizar su trabajo. Lograr que un nuevo producto alcance su máximo potencial de ingresos, el producto y la compañía que lo ofrecen deben ganarse rápidamente una reputación de calidad y confianza.

Veamos los beneficios económicos del aseguramiento de la calidad del producto en fábricas de alimentación:

1. Alienta la conciencia de calidad, entre los trabajadores de la fábrica, para lograr el nivel deseado de calidad en el producto. Extender la calidad del producto más allá de los límites del cumplimiento, en sí es el catalizador que impulsa el aumento de ventas y los clientes satisfechos. Las innovaciones están proliferando en todos los sectores de fabricación de productos alimenticios, desde la impresión 3D hasta los productos habilitados para WiFi capaces de asumir una integración de datos en tiempo real. Lo que falta es una intensidad correspondiente para innovar la calidad al mismo ritmo y escala.
2. Mayor satisfacción de los consumidores, debido a que hay un mayor control del aseguramiento de la calidad del producto creando confianza y valor hacia la empresa, lo que se traduce en mayores ventas.
3. Reducción en el costo de producción, porque hay mayor control y verificación durante la fabricación del producto y de los desperdicios inferiores.
4. Utilización más efectiva de los recursos, minimizando el desperdicio y la ineficiencia de todo tipo.
5. Técnicas y métodos de producción mejorados, mediante el suministro de datos técnicos y de ingeniería para el producto y los procesos de fabricación.
6. Publicidad efectiva, gracias a que se producen productos de calidad ganan la confianza del público.
7. Incremento de ventas, porque se mantiene la demanda existente y se crea una nueva demanda para el producto.
8. Reduce las Autorizaciones de devolución de materiales (RMA), ya que mejorar la calidad del producto garantiza la recuperación del servicio y los costos de retiro, todo lo cual conduce a una menor rotación de clientes.

Recientemente, se ha demostrado que el coste directo de calidad en la industria alimenticia es de aproximadamente 6.8% al 9.4% de las ventas, lo que equivale entre €23 mil millones y €33 mil millones al año. Por tanto, el ritmo de las mejoras de calidad en la fabricación de alimentos no está al ritmo de la creación de nuevos productos sino en su calidad.

Estas estimaciones se basan en ingresos anuales actuales de la industria a una tasa de ejecución de aproximadamente €270 billones. Es por ello, que surge la necesidad de ir más allá del simple seguimiento de los costes para prevenir o detectar fallas de calidad y abordar así los costes indirectos y directos de calidad.

Esto determina que el coste directo de asegurar una buena calidad es un tercio de este coste total y el resto se debe al coste directo de una mala calidad.  El siguiente gráfico muestra el valor del aseguramiento de la calidad del producto en fábrica de alimentos, proporcionando un análisis de cómo influye el coste directo de la calidad en la industria alimenticia.

Esto infiere a que realmente el coste directo del aseguramiento de la calidad del producto es mínimo con respecto a las fallas que se generan por la mala calidad del producto. Mientras más rápido se definan y actúen sobre los atributos de calidad crítica CQA, más efectivos serán al asignar Puntos de Control Críticos (CCP) antes de generar órdenes para fabricar los productos.

Al concentrarse en mejorar un conjunto básico de CQA, los responsables de la fabricación de productos alimenticios estarán en la capacidad de aumentar los ingresos y reducir los costes, así como también de aumentar la satisfacción y confianza del cliente.

Si deseas conocer las 5 tecnologías de mantenimiento predictivo industrial que mejoran tus máquinas e instalaciones o conocer la evolución de la automatización en la industria alimentaria, te invitamos a suscribirte al Newsletter de Tecnología para La Industria, desde el cual recibirás boletines informativos de los nuevos artículos publicados referentes a esta temática.